Mi definición equivocada de marketing y mi viaje por Centroamérica [parte 1]
Después de 5 años dedicándome al marketing, me doy cuenta de que estaba equivocada. Nunca imaginé lo que podía venir después de ese blog de viajes.
No estudié una carrera de marketing.
Como la mayoría de personas que se dedican a este sector, no fui a la universidad a que me contasen cómo funcionaba el marketing hace 30 años.
Simplemente hice lo que hago siempre: buscar respuestas.
En ese momento me encontraba contando los días para salir de una empresa que no me estaba dejando crecer.
Creo que la peor sensación que puedes tener es sentir que no estás aprovechando tus capacidades. Que estás desaprovechando tu vida.
Y así es justamente como me sentía en ese horario de oficina.
Buscando por internet llegué al blog de Ángel Alegre: viviralmaximo.com
Lo que encontré en esos artículos hizo que me explotara la cabeza. Hablaba de emprender, de viajar, de tener libertad, de otros caminos poco convencionales…
Spoiler: no era todo tan idílico.
Pero leer ese blog, wow. Aún recuerdo la sensación que se me quedaba cuando descubría a esas personas extraterrestres que estaban viviendo fuera del sistema.
Era un mundo nuevo para mí que encima no podía hablarlo con nadie.
En unos de esos artículos se mencionaba el libro por el que a muchos nos hizo un clic de no retorno: La semana laboral de 4 horas.
Un libro criticado por muchas personas, pero que para mí fue un antes y un después.
Estaba convencida: iba a emprender.
La decisión no fue rápida ni fácil. No tenía claro cómo empezar ni cómo dejar atrás la supuesta vida que estaba planeada para mí.
¿Dejar un trabajo de lo que has estudiado? - Estás loca.
En esos tiempos era una chica afortunada por haber empezado a trabajar tan pronto en una empresa como esa.
Pero yo solo quería descubrir el mundo.
Tardé más de 1 año en tomar la decisión de dejarlo todo y probar suerte en internet.
Durante esos meses mi cabeza funcionaba muy rápido. Recuerdo levantarme con mil ideas de emprendimiento y negocios digitales.
Grababa audios de tantas cosas que se me ocurrían. Mi energía se triplicó.
Ahora entiendo que estaba buscando una salida y mi cuerpo me estaba diciendo: let’s go!
Por fin, en enero del 2019 tomé la decisión de invertir en mí
Dejé la empresa y me fui un mes a las highlands de Escocia a conocer las vacas esas peludas y “vivir” de mi nuevo blog de viajes.
Al volver, me cogí un avión de ida a Panamá para no volver hasta haber ingresado mis primeros euros online (que sucedió 3 meses después).
Esos primeros meses del 2019 apostando por mí, por mis sueños, por mis capacidades, por mí misma. Los recuerdo como una etapa de liberación.
No he vuelto a conseguir aún sentirme como en esos meses.
Desprendía una energía muy loca. Mi forma de entender el mundo cambió por completo.
No solo por lo que estaba descubriendo que se podía hacer en internet, sino por ese viaje sola por Centroamérica.
Tenía una confianza en mí misma que sobrepasaba cualquier miedo.
Sabía que iba a salir bien. Sabía que estaba cogiendo el camino correcto y por fin sentí que yo elegía cada siguiente paso de mi vida.
No los demás.
El juego había cambiado.
Experimenté tal crecimiento personal, que cuando volví varias personas me dijeron que estaba más alta. Sí, de altura.
Volviendo al tema del marketing
A partir de ese 2019, me metí en el agujero del marketing digital del cual aún no he conseguido salir.
Durante estos 5 años he ido evolucionando mi visión sobre los negocios digitales.
Aprendiendo, observando y equivocándome.
He ido atando cabos sueltos y creando una estructura en mi cabeza sobre lo que creo que funciona y lo que no.
Pero claro, es MI FORMA de ver el marketing.
Desde hace ya unos años he empezado a sentir incoherencias de lo que otros expertos decían.
No estaba de acuerdo con ciertas formas de hacer las cosas.
Ahora me doy cuenta de que estaba equivocada
Lo que yo creo que es marketing, para mucha gente no lo es.
Y eso fue lo que me hizo pasar de marketing a growth con una visión de producto.
Ahora, después de darle vueltas a estos conceptos, he llegado a una conclusión. O, por lo menos, a mi definición de marketing.
Hay mucha confusión entre marketing vs. growth.
O visión de marketing vs visión de producto.
Coinciden en muchas cosas, pero no son igual. Después de pasar por todas, tengo mucho que contar sobre este tema.
Pero creo que ya lo dejamos para un post completo otro día. 😊
Dejando el marketing atrás, me gustaría que me contaras alguna experiencia en comentarios parecida a la que experimenté yo durante esos meses de liberación.
Quizá fue cuando empezaste a emprender, durante un viaje o cuando nació tu primer hijo.
No sé.
Pero de ahí es de donde crecemos. En esos principios es cuando damos fin a una iteración para empezar la siguiente con los aprendizajes en la mochila.
Yo empecé con un blog de viajes pensando que era mi negocio definitivo (suerte).
Pero no tenía ni idea las vueltas que me iba a dar la vida.
Martaaa! Acabo de flipar sabiendo que tenemos orígenes similares.
El blog de ángel creo que nos removió a muchos, el libro de la jornada laboral de 4 horas me hbrío los ojos y cuando lei lean startup me encajo todo
Muchas gracias por tu post, trabajamos poco juntos pero se te veia un talento descomunal en la parte de dominar el caos y si le sumamos cómo trabajas con datos, te hace un perfil muy poderoso de producto digital