Vamos a hablar de dinero, pasta, guita, euros y todo eso que se esconde por detrás (audio)
Cuando le di la vuelta a la ecuación (y a mi mentalidad) la facturación anual se duplicó. Dejó de importarme el éxito hacia fuera para empezar a entender mi propio éxito.
El mundo emprendedor es peligroso.
Las redes sociales se llenan de gente “exitosa” que les va bien, que facturan miles de euros al mes y que encima les da tiempo a estar bien física-emocionalmente, ir a todos los eventos, viajar 6 meses al año y tener 3 side projects funcionando.
Nadie dice la verdad completa.
Si gestionas esto bien, te servirá de inspiración. De booster. Te abrirá puertas si escuchas lo que importa e incluso si te atreves a preguntar cómo lo hicieron.
Pero si no sabes filtrar para manejar la información, puedes hundirte en la mierda.
Puedes llenarte tanto de estiércol que te quedarás sin respiración. A oscuras. E intentado salir de ahí como de unas arenas movedizas se trataran, chillando, temblando y hundiéndote poco a poco.
Puede que vuelvas con un escudo más grande o puede que no vuelvas nunca más a emprender.
Yo me he hundido (varias veces)
Yo fui de las que entré en el 2019 con la promesa de: emprende y sé libre.
Eso es lo que yo me creí: quería viajar con mi furgoneta. Y pensé que haciendo 4 cosas en internet, me ganaría la vida mientras me tocaba el toto.
Já.
Era la época dorada del infoproductor donde todos queríamos ser nómadas digitales, vivir nuestro sueño y enterrarnos de dinero fácil por afiliación.
No tardé mucho en darme cuenta de que era mentira. Muchos se llenaron de rabia y es cuando empezó la época de los vendehúmos y los grupos de hate. Allá por el 2020-2021.
Mientras unos se quejaban de que les habían engañado y les iba a tocar trabajar en lugar de pasarse el día comiendo pad thai en el sudeste asiático, yo estaba currando como una hija de puta para sacar adelante algo en internet.
Y así lo hice.
En los 3 primeros años puede decirse que me la pasé en la mierda. Inocente. Creo que no sabía a qué estaba jugando.
Solo pensaba en mi sueño de emprender. Lloraba mucho, me enfada y me metía en bucles cada dos por tres.
Pero en estos 2 últimos años mi mentalidad ha cambiado
He notado una madurez emprendedora (no sé cómo llamarlo).
Supongo que ha sido por aprendizaje de todas las crisis que he pasado. Todos los marrones que me he comido. Y todas las hostias que me he llevado.
Luchando contra mí misma.
He aprendido a ir a la mía, con mis movidas. Aprovechando oportunidades de este ecosistema a mi favor, a reírme en lugar de llorar y a seguir avanzando en lo que realmente quiero.
Ya no me importa lo que otros piensen de mí porque en cualquier momento cierro el chiringuito y me voy al monte. Muy poca gente de aquí realmente va a seguir en mi vida si me voy de internet.
De hecho: no me conoces. ¿Vas a venir a darme un abrazo cuando esté mal? No creo.
Es una de las razones por las que creo que he cambiado mi forma de expresarme. No me importa decir la verdad de que no me ha ido bien o decir alguna palabrota.
Para mí esto es como si se lo estuviera contando a un colega.
Mi propósito en la vida es dormir feliz. Acostarme en la cama por la noche con una sonrisilla en la cara sabiendo que ha sido un buen día y que he aprovechado mi vida. Dando gracias por todo lo que tengo y emocionada por lo que voy a hacer al día siguiente.
Y dormir del tirón.
Esto para mí es felicidad.
No busco comer pad thai ni pasarme el año viajando con mi portátil. Busco una vida de paz donde pueda hacer en cada momento lo que me apetezca. Ya sea trabajar o tumbarme en una hamaca a leer.
Y para una vida de paz: necesito dinero
Voy a intentar explicar la evolución de mi mentalidad respecto a este tema.
Los primeros años veía el dinero como algo que me ayudaba a comprar cosas físicas. Esta definición parece una mierda, pero espera.
Mi objetivo era hacerme un sueldo como cualquier persona que trabajaba por cuenta ajena, pero con mis cositas guay de freelance.
Primero quise llegar a los 1000€, luego 2000€, 2500€, 3000€…
Todo ok. Es lo que la mayoría de autónomos quiere. Tener un sueldo que pague sus fetiches y adicciones, pero bajo la etiqueta de “freelance” y sin depender de otros.
Mi objetivo cuando empecé a emprender era ganar dinero para comprarme una furgoneta. La conseguí a los 2 años (camperizar ya me costó un poco más, fucking locura).
Me hice 6 cuentas de banco, como recomendaban los gurús.
La de ingresos, gastos, impuestos, fondo de emergencia, inversión. Todas ellas separadas de mi cuenta personal que tenía que estar en otro banco, claro.
Tenía mi excel de finanzas que revisaba cada mes.
Y le pagaba a un gnomo para que me contase todos mis billetes por las noches. Esto último es broma, pero lo vi en el bonus de un curso que acababa en 97.
Hacía todo lo que se supone que tenía que hacer con mi dinero
Hasta que empecé a morir con un burnout tras otro.
Se me da bien ganar dinero con servicios. Soy buena, rápida, vendo bien en directo, me gusta el trato con clientes, trabajo bien, etc. A pesar de haber tenido épocas de mierda donde no me entraba ningún cliente, más o menos me mantenía.
No he trabajado de nada que no sea de freelance durante 5 años. Antes me moría de hambre.
El dinero entraba, pero mi tiempo se esfumaba.
Estaba cambiando mi tiempo por dinero. Un pacto que parece casi hecho con el diablo.
Estos 2 últimos años he empezado a obsesionarme con el tiempo. Tanto que quiero escribir un post sobre esto.
Descubrí que para esa vida de paz que estaba buscando, necesitaba tiempo. No dinero.
Así que cambié por completo mi mentalidad.
Dejé atrás mi ego
Esto fue chungo.
Dejé atrás la supuesta vida de éxito que todos esperan en internet a cambio de ganar tiempo.
Y es cuando empezó a darme igual cambiar una y otra vez de perfil. Podría haberme quedado de copy, pero tendría que usar mucho mi tiempo para ganar dinero. Y ese no es el plan.
Pasé a growth porque sabía que me iban a pagar más.
Y estoy en producto por la misma razón: los sueldos y los servicios son mucho más altos. Lo que me permite ganar más en menos tiempo.
Ya no uso las 6 cuentas del banco porque TODO (salvo impuestos y gastos) va directo para ahorro e inversión. No quiero reinvertir en mi negocio, me da igual no crear un negocio exitoso. Solo quiero tiempo.
Ya no veo el €/hora como rentabilidad de mi trabajo. Lo veo como rentabilidad de mi tiempo.
Cuánto tiempo vale mi hora en lugar de cuánto dinero vale mi hora. Es darle la vuelta a la ecuación
€/h = t
t/h = €
Primero miro la la unidad de hora, luego el dinero.
Y cada vez cobro más caro, no por ganar más dinero, sino por ganar el mismo pero teniendo más tiempo.
🔊 Audio sobre el momento que cambió mi mentalidad sobre esto
El éxito para mí es estar hasta arriba de tiempo, no de dinero
Para mí, la persona que está en paz con su vida y que tiene tiempo disponible para usar cuando quiera: es la que tiene éxito.
La que hace lo que le sale del culo: es la que tiene éxito.
La que ha mandado a la mierda el ego, orgullo y la demostración social: es la que tiene éxito.
Gente, la vida es muy corta.
A mí me da miedo.
Yo no quiero matarme a trabajar ahora para tener libertad dentro de 20 años. Yo quiero tener libertad ahora. Quiero ser feliz ahora. Quiero dormir en paz cada noche ahora.
Y eso pasa por dejar de lado el ego malo, ver el dinero como un intercambio de tiempo y mandar a la mierda lo que piensen los demás de ti.
No somos tan importantes ni lo seremos.
Deja de intentar impresionar a otros, empieza a crear un sistema que te impresione a ti cada día.
Trabajo de product manager freelance en empresas que estén en fase growth y necesiten una persona que se encargue de la mejora, desarrollo o gestión de un producto digital.
También ofrezco mentorías y consultorías a emprendedores digitales que necesiten un push en su estrategia de venta, estructuración de productos/servicios o acompañamiento durante un lanzamiento o MVP.
Si te interesa, contáctame y hablamos: hola@martalavanda.com
Y si te ha gustado el post, compártelo para ayudarme a llegar a más personas. 💛
Buenas Marta, nada , solo decirte que me topé con tus post y me has hecho el día.
Muchísimas gracias por escribir por aquí ☺️☺️
Gracias por tu post. Yo era de esas que se pasaban horas editando reels para instagram con la esperanza de obtener reconocimiento ( y algún dinerillo) hasta que me di cuenta que estaba ausente de mis niños y mi familia y que mi verdadera misión ( o propósito que está muy de moda entre gusrús de medio pelo) era la de "vivir". Después de eso lo dejé todo.
He encontrado en tu escritura un sentido a mi decisión y me alivia pensar que no me he equivocado y que hay otras personas en ese punto vital.
Gracias por compartir porque me has ayudado a encontrarme y a seguir aceptándome